La Comisión Bicameral de Defensoría del Pueblo de la Nación, a propuesta de Cambiemos en acuerdo con el PJ y el Frente Renovador, elevó al Senado la terna de candidatos compuesta por Humberto Roggero, Jorge Sarghini y Alejandro Amor, a fin de designar al Defensor del Pueblo.
Sin embargo el kirchnerismo votó en contra y propuso en minoría a Remo Carlotto, Liliana Negre de Alonso y María José Lubertino, por lo cual el cargo seguirá vacante como desde hace 8 años, ante la imposibilidad de arribar al consenso necesario para votarlo con dos tercios de los votos en cada cámara.
Salvo por la oposición de Schiaretti y de la Sota, Roggero es quien cuenta con mayores posibilidades gracias a una negociación entre Miguel Pichetto y Cambiemos, pero habrá que esperar a la renovación del 10 de diciembre para que con la merma de la representación cristinista, pueda designarse al nuevo Defensor.
La diputada Graciela Camaño se mostró muy poco optimista al señalar que «la Constitución ha querido que no tengamos Defensor», al analizar la exigencia de los dos tercios. Con mucha más razón viendo la relación de furzas en Diputados.
Representantes del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) y de Directorio Legislativo presentaron objeciones con respecto al proceso de elección de la terna. Cuestionaron que no se haya habilitado una instancia para eventuales impugnaciones de candidatos y que no se hayan realizado audiencias públicas.
La presidenta de la comisión bicameral de la Defensoría del Pueblo, Marta Varela, afirmó que “desde el año pasado, la comisión que presido se manejó de manera prolija y de acuerdo a la ley”, al tiempo que sostuvo que “lamentablemente los tiempos nos corren (el 26 de noviembre habrá una reunión con la ONU) y tenemos que dar muestras de consensos”. Y en esa línea, agregó: “Debemos afirmar y apoyar nuestro órgano de control, manteniendo así el status alcanzado”.
“Es la primera vez después de ocho años que un Gobierno desea poner en marcha los organismos de control”, valoró la senadora Varela, para luego expresar que “la terna que se votó y que obtuvo la mayoría es la que va a ir al recinto y ahí se decidirá cuál de los tres candidatos propuestos será el próximo Defensor del Pueblo”.
En la misma línea, la diputada Silvia Lospennato subrayó que “no podemos dejar ninguna duda de que estamos actuando a favor de la ley”, para luego sentenciar: “Hoy acá ha habido una decisión mayoritaria y respetarla es fundamental en democracia”.
La diputada Graciela Camaño coincidió en “priorizar que la terna llegue con el mayor consenso posible”, al tiempo que hizo hincapié en que “ninguno de los candidatos designados es un desconocido”, para finalizar ratificando que “nos corren los tiempos y no quiero volver a naufragar en este tema”.
En contrapartida, la diputada Juliana Di Tullio, quien propuso la terna alternativa, lamentó que los candidatos designados por la mayoría “no hayan sido consensuados con todos los bloques”, al sostener que se enteró de los nombres “al llegar a la comisión” y que “hay por lo menos dos diputados y dos senadores que no fuimos consultados”.
“Nos parecía fundamental que en la terna hubiera una mujer, algo que tendría que ser natural, pero no hemos podido conseguir las firmas necesarias para lograr la paridad”, expresó Di Tullio.
La presidenta de la Bicameral anunció que el martes próximo se desarrollará una audiencia en la cual los tres candidatos designados podrán exponer sus propuestas para ocupar el cargo de Defensor del Pueblo.