Se dio en el marco del plenario de las comisiones de Industria y la de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, que presiden Marcelo Casaretto (FdT) y Facundo Manes (UCR) respectivamente. El objetivo de la iniciativa del Poder Ejecutivo es prorrogar la vigencia hasta el 31 de diciembre de 2037 del régimen.
El proyecto de ley, enviado por el Poder Ejecutivo en abril de 2022, tiene por objeto sustituir la denominación de la Ley 26.270 por la de Promoción del Desarrollo y Producción de la Biotecnología Moderna y la Nanotecnología y prorrogar su vigencia hasta el 31 de diciembre de 2037.
Durante la reunión informativa expusieron, en representación del Poder Ejecutivo, el secretario de Industria, Economía del Conocimiento y Gestión Comercial Externa, Ariel Schale; la subsecretaria de Economías del Conocimiento, María Apólito, y el presidente de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (I+D+i), Fernando Peirano.
Ariel Schale, al inicio, planteó que el objetivo del proyecto es “seguir fortaleciendo el entramado productivo nacional, que es uno de los sectores más dinamizantes, donde se despliegan las mejores capacidades de los argentinos como es el sector de la biotecnología”. Asimismo, enfatizó en “poder marcar un horizonte a largo plazo para que nuestras empresas puedan planificar con tranquilidad y estabilidad del marco normativo”.
Luego, María Apólito resaltó que “la biotecnología es un sector relevante en Argentina, que está dentro de los veinte países con más empresas dedicadas a dicha temática, donde se apuesta fuertemente, sobre todo, al tema agro, salud humana y animal”. En esa línea, consideró importante sumar la nanotecnología al régimen al afirmar que “son tecnologías transversales a muchos sectores productivos”.
A su turno, Fernando Peirano apoyó “firmemente” la prórroga para dar certidumbre, apoyar la incorporación de la nanotecnología y avanzar hacia lo multidisciplinario. “Apoyemos un instrumento que tiene como rasgo los proyectos intensivos de bienes de capital y démosle a esa inversión, importante y distintiva para nuestro país en investigación y ciencia básica, la oportunidad de transformarse e ir de las ideas a los proyectos, de los proyectos a nuevos productos, y porque no a nuevos empleos y exportaciones”, detalló.
También, expusieron, entre otros, Diego Latorre, presidente de Tecnovax; Pablo Turek, director de Crudda; Gabriela Ciccia y Sergio Drucaroff, de la Cámara Argentina de Biotecnología; Alejandro Vila, director científico de la Incubadora de emprendimientos científico-tecnológicos de la Universidad Nacional de Rosario; Javier Viqueira, presidente de Adox; Diego Comerci, director científico de Chemtex Argentina; y Marcos Serventich, de Richmond, del laboratorio Richmond.