El comunicado de prensa emitido anoche por el Palacio de Hacienda expresa:
La República Argentina lamenta la decisión adoptada en el día de la fecha por la Cámara de Apelaciones del Segundo Circuito de los Estados Unidos, que deja sin efecto la suspensión (“stay”) de las medidas cautelares pari passu dictadas por el Juez Griesa.
Las órdenes pari passu le impiden a la Argentina efectuar el próximo 30 de junio el pago de los cupones de deuda en cumplimiento a sus acreedores reestructurados a menos que, en simultáneo, pague la totalidad de lo reclamado por los fondos buitres (que podría ascender a U$D 15 mil millones)
El levantamiento del “stay” por parte del Segundo Circuito imposibilita así el pago en Nueva York del próximo vencimiento de la deuda reestructurada y muestra la inexistencia de voluntad de negociación en condiciones distintas a las obtenidas en la sentencia dictada por el Juez Griesa.
Por último, Argentina reitera la voluntad de pago a sus acreedores reestructurados, ya que siempre ha ofrecido pagar bajo las mismas condiciones y en concordancia con la ley del país.
El comunicado fue emitido luego de conocerse el resultado de la audiencia mantenida en horas de la tarde entre los abogados que representan a nuestro país y los que representan a los holdouts en el despacho del juez Griesa, en el que según ha trascendido, el juez se mostró muy amigable con los litigantes, sin perjuicio de lo cual citó para la próxima semana a una nueva para que Argentina explicite su voluntad de negociación a través de la presentación de una propuesta concreta a los holdouts.
Si bien el comunicado no da por terminada la negociación, insiste sin embargo en la imposibilidad de cumplir con el fallo de la justicia norteamericana en los términos en que está planteado –lo que el gobierno viene haciendo desde el discurso en cadena del pasado lunes-, por lo que anuncia que de no aceptarse las condiciones que proponga nuestro país –o mejor dicho, las que propongan los tenedores de bonos – el 30 de junio Argentina entraría en un nuevo default.
Por ello este comunicado representa un hito en la negociación. Más que un mensaje al pueblo argentino, que mayoritariamente desconoce hasta lo que es un bono, es un mensaje a los tenedores de bonos argentinos de todo el mundo. Es una apuesta a que los tenedores de bonos de deuda reestructurada resuelvan una negociación que hasta ahora ha salido muy mal. Redoblar la apuesta es sin dudas una “jugada” de sumo riesgo, máxime cuando varios legisladores que participaron en la reunión realizada por la mañana con el ministro de economía, el Jefe de Gabinete y el Secretario de Legal y Técnica, aseguraron que los funcionarios del Ejecutivo se comprometieron a volver a consultarlos antes de llevar al país a un nuevo default.
Por último y para completar el cuadro de situación, vale recordar que de la mencionada reunión, los representantes de la oposición salieron entre indignados por la falta de precisiones por parte del gobierno y preocupados por la impericia o desconocimiento de los responsables del área económica, “cuyos desastrosos resultados ahora quieren que la oposición comparta”, según dijo por ejemplo la diputada Graciela Camaño.
Curiosamente en la conferencia de prensa brindada minutos después, el Jefe de Gabinete Capitanich manifestó su satisfacción por el apoyo obtenido por parte de los representantes de todas las bancadas. Deben haber estado en reuniones distintas.
Por todo esto se nos ocurrió ilustrar esta nota con humor, recordando al famoso personaje del maestro Fontanarrosa, Don Inodoro Pereyra, que ante los problemas respondía siempre con declaraciones de principios, mientras su perro Mendieta en cambio le aconsejaba negociar. Ahora la amenaza son los buitres y no los loros que solían atacar a Don Inodoro.