EL PRÓXIMO MARTES PASARÁ A LA FIRMA Y EL MIÉRCOLES SERÁ TRATADO EN EL RECINTO.
A seis días de su tratamiento en el recinto, hoy se presentó un dictamen a favor de la despenalización del aborto en el plenario de las comisiones de Legislación General; Legislación Penal; Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia y Acción Social y Salud Pública de la Cámara de Diputados.
El martes pasado comenzó el debate de los diputados integrantes del plenario, quienes continuaron hoy con la discusión del proyecto al exponer sus posturas a favor y en contra de la interrupción voluntaria del embarazo. Previamente se escucharon un total de 738 oradores que expusieron en 15 audiencias abiertas.
El próximo martes se pasarán a la firma los dictámenes. En tanto, tal como ya había sido consensuado, los proyectos serán tratados el 13 de junio en el recinto, en una sesión sobre tablas.
Al comienzo de la reunión, las diputadas Victoria Donda (Libres del Sur) y Mónica Macha (FPV-PJ), fueron las encargadas de leer el dictamen consensuado del proyecto sobre despenalización del aborto.
“Después de mucho trabajo en estos dos meses, logramos llegar al consenso que va en la dirección en la que va la sociedad”, sostuvo Donda, una de las principales impulsoras de la iniciativa de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
Al respecto, Brenda Austin (UCR) detalló algunas de las modificaciones que se incluirán en el dictamen consensuado: la objeción de conciencia, para los médicos que no quieran realizar la práctica del aborto tengan un amparo legal para hacerlo; cambios respecto de cómo funcionaría la ley en embarazos de adolescentes de entre 13 y 16 años; y la incorporación de la figura de las consejerías, con acompañamiento psicológico y social, para que la mujer «no se sienta sola al tomar la decisión».
“La ley se sostiene sobre un principio de libertad, avanzando hacia un Estado que no imponga dogmas, creencias y convicciones religiosas en sus leyes. Es un proyecto que no le impone nada a nadie, sino que busca incluir a toda la sociedad más allá de las diferencias”, dijo Austin.
También desde la UCR, Alejandra Martínez, titular de Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia, se expresó a favor de la despenalización y les solicitó a sus compañeros de bloque que “nos den la oportunidad de sancionar esta ley para que no haya más muertes de mujeres, algo que se expresa de una manera dramática cada día”. “Soy católica pero no puedo atarme a mis creencias, porque no puede haber más hipocresía”, agregó Martínez.
En contra de los proyectos sobre interrupción voluntaria del embarazo, Javier Pretto (PRO) celebró el debate y que se haya puesto sobre la mesa un tema “difícil” que –según dijo- “no se pueda resolver en una ley, más aún cuando está en juego la vida”. “Una Nación no podría estar fundada en un disvalor como la eliminación de la vida. No optemos por el atajo y trabajemos por las dos vidas”, añadió.
Por su parte, Romina del Plá (Frente de Izquierda y de los Trabajadores) criticó la enorme presión que “está ejerciendo la iglesia tergiversando la realidad a niveles impresionantes”. “Necesitamos defender el derecho de terminar con las mujeres que mueren por los abortos clandestinos y el negociado de las clínicas”, subrayó Del Plá.
Pese a manifestarse en contra de la inclusión de la objeción de conciencia, Araceli Ferreyra (Peronismo para la Victoria) expresó que “el 13 de junio vamos a elegir si queremos seguir con la legislación de la época de las carretas o si derogamos el último delito con estigma de género como el aborto”.
En tanto, Silvina Frana (FPV-PJ) rechazó la iniciativa al expresar que “el Estado tiene la obligación de promover, proteger y cuidar la dignidad de tres poblaciones bien definidas: las mujeres, las mujeres en conflicto con su embarazo y los niños por nacer”. “No reconocer que hay mujeres que mueren por abortos clandestinos es tan negador, y poco serio, como no aceptar que hay un ser humano”, agregó Frana.
Desde el bloque PRO, Silvia Lospennato, se dirigió a los que están en contra del proyecto al pedirles que “no tengan miedo que la sociedad avanza conquistando derechos y los ejerce. No voten contra las mujeres ni contra su salud”.
“Estamos dispuestos a incorporar más modificaciones, pero no a votar en contra de los derechos, retroceder en nuestra legislación y así esconder un problema de salud pública debajo de la alfombra”, manifestó Lospennato al referirse específicamente al texto de pre dictamen.
En contrapartida, Carmen Polledo, también del PRO y titular de la Comisión de Acción Social y Salud Pública, justificó su negativa a respaldar la iniciativa de despenalización del aborto: “De ser aprobada la ley significaría ejercer una violencia de alguien poderoso contra alguien débil, y no me interesa para la sociedad como país”.
En esa misma línea, Marcela Campagnoli (Coalición Cívica) sostuvo que “tenemos la obligación de legislar en forma racional y sensata, sin hacerle creer a las mujeres que la ley viene a terminar con todos los problemas e injusticias que sufrimos todos los días”. Luego les habló a quienes están a favor del aborto: “Deben decir que buscan otorgarles a las mujeres el derecho a abortar en forma irrestricta y no reducir la mortalidad materna”.
Para finalizar, tomó la palabra Daniel Lipovetzky, presidente de Legislación General, quien destacó el valor de haber construido «un camino distinto en base al respeto; nos han elegido para votar leyes que implican cambios y nuevos desafíos”. Igualmente consideró que el proyecto de despenalización aporta “a mejorar la salud pública de las mujeres en la Argentina” y afirmó que “seguramente los 257 diputados no estamos conformes con su estado actual”.