La maniobra del cristinismo para manipular al peronismo desde el nuevo Consejo Nacional –urdida no sin dificultades por el chueco Mazzón-, ya tiene una respuesta lógica desde el peronismo no Cristinista: habría una interna en las PASO del año entrante entre De la Sota y Massa.
La sola mención de dicha posibilidad hiere tanto a Zannini como a Scioli, ya que la interna del FpV/PJ debería enfrentar a la del FR, con pesos pesados del peronismo como los Intendentes de la Pcia de Bs.As., el Lole Reuteman en Santa Fe y al “Gallego” De la Sota en Córdoba.
A estos peronistas, además de la visión crítica de las políticas económicas o sociales que tienen del actual gobierno y su proyecto de continuismo encarnado por Scioli, también los une el espanto, como diría Borges. Espanto a que el peronismo quede en manos de la «orga» juvenil, espanto a que el futuro gobierno lo asuma el Piñeyra argentino.
Lo que hace algunos años se aplaudió e incluso se vio como la maravilla de hacer resurgir la política y las utopías en miles y miles de jóvenes y el hecho que en cada test electoral el peronismo (en todas sus variantes) no baje del 60/70%, hoy empezaron a estrellarse contra una pared de soberbia e intransigencia, y lo que es peor, a veces contra la falta de gestión o la inoperancia. Lo interesante es que estas cosas se escuchan también dentro del armado oficialista, por lo que no es seguro que el espacio esté ya tan bien cerrado o “alambrado” como esperan.
Si como sostienen algunos analistas, la fortaleza de Massa reside en su atractivo para el electorado no peronista, unas PASO del FR con figuras tan peronistas como De la Sota y Reuteman, podrían confundir a ese 30% que piensa o “siente” que solo un futuro gobierno peronista puede reencausar los desaguisados que hoy padecemos en casi todos los frentes, desde el económico hasta el político, pasando por el social o el ambiental. Esta confusión minaría la fortaleza del armado oficialista, cual es la de concentrar el voto peronista.
Para completar la serie de disgustos del gobierno, mientras los análisis de poco vuelo o los rumores hacían foco en cuál de los candidatos podría garantizar impunidad futura, la «corpo» -que no es Clarín- comienza a acondicionar la pista en que se convertirán los pasillos de Tribunales. No serán las Olimpiadas, pero que algunos van a «bailar» bastante es seguro. Es que comienzan a abrirse los cajones de varios Jueces Federales y las primeras causas salen a ver la luz, luego de una prolongada siesta. Parece que aclaró tanto que hasta las Cámaras amigas empezaron a ensillar, previéndose un maratón de final abierto.Otra cosa que no vieron venir, una nueva equivocación.
Para finalizar, Boudou no solo es fuente de preocupación por su situación en la Justicia. Como si Kicillof no tuviera suficiente con los problemas que –a menos que desmientan a Mario Blejer- la economía ya posee, gracias a la inoperancia de algunos cuadros juveniles de la administración, continúa la influencia del Vice Presidente en algunas áreas del Ministerio. Se comenta por ejemplo que existen funcionarios cuyo mayor mérito es haber cocinado para Benigno Vélez, los cuales hoy son oráculo de consulta del Dr. Federico Thea.
¿La consecuencia? Meses y meses sin firma de expedientes, problemas gremiales y de índole judicial que terminarán con fuertísimas erogaciones para el erario público. Se rumorea que algunos expedientes no se mueven hasta que aparecen los interesados, lo que indicaría que la desprolijidad, tuvo su saga.